Abultada la derrota encajada por nuestros chavales el sábado pasado. Abultada y, creo, un poco excesiva. Creo que un 6-1 ó un 6-2 hubiera sido un resultado más justo con lo visto en el conjunto del partido.
Y es que los comienzos del partido fueron esperanzadores para los intereses del equipo. Los nuestros le jugaron al Santa Isabel de tú a tú durante muchas fases de la primera parte. Todos los que estuvimos allí nos lamentábamos del mano a mano con el portero que tuvo uno de los delanteros cuando el marcador estaba con empate a uno: de habernos podido poner 1-2 (ahí es nada, en casa del todopoderoso Santa) vimos como en la siguiente jugada nos metían el 2-1... no hay suerte esta temporada. El resto del primer tiempo siguió con un nivel de juego parecido por ambos equipos hasta que se llegó al intermedio con un más que digno marcador de 3-1.
La segunda parte fue otra historia. Nada que ver con la primera. No sé si por bajón físico o moral del Alcañiz, o simplemente por méritos del contrario. Sobre el tema psicológico habría que hablar con la directiva y que pongan un psicólogo deportivo para estos chicos (jejeje...). El caso es que sólo hubo un equipo en el campo; si a eso le añadimos que el Santa, además de frenar cómodamente los tímidos intentos del Alcañiz, realizó uno tras otro contragolpes mortales que acabaron en gol en un 90% de las ocasiones, pues ya podemos entender el porqué de un resultado final tan escandaloso.
En resumen, derrota justa, aunque demasiado grande, ante un equipo que a mí personalmente me ha parecido lo mejor que he visto en esta liga. Desde aquí les deseo que sigan así y, desde luego, por su calidad, me gustaría que ganasen la liga y el ascenso por que, por lo que yo he visto, se lo merecen.
Nosotros, a lo nuestro, a seguir trabajando y a luchar por hacerlo algo mejor en la segunda vuelta. El sábado, primer gran escollo ante el San Gregorio. A ver si tenemos la misma suerte que el partido de ida.
Nos vemos.
La segunda parte fue otra historia. Nada que ver con la primera. No sé si por bajón físico o moral del Alcañiz, o simplemente por méritos del contrario. Sobre el tema psicológico habría que hablar con la directiva y que pongan un psicólogo deportivo para estos chicos (jejeje...). El caso es que sólo hubo un equipo en el campo; si a eso le añadimos que el Santa, además de frenar cómodamente los tímidos intentos del Alcañiz, realizó uno tras otro contragolpes mortales que acabaron en gol en un 90% de las ocasiones, pues ya podemos entender el porqué de un resultado final tan escandaloso.
En resumen, derrota justa, aunque demasiado grande, ante un equipo que a mí personalmente me ha parecido lo mejor que he visto en esta liga. Desde aquí les deseo que sigan así y, desde luego, por su calidad, me gustaría que ganasen la liga y el ascenso por que, por lo que yo he visto, se lo merecen.
Nosotros, a lo nuestro, a seguir trabajando y a luchar por hacerlo algo mejor en la segunda vuelta. El sábado, primer gran escollo ante el San Gregorio. A ver si tenemos la misma suerte que el partido de ida.
Nos vemos.
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